domingo, 8 de noviembre de 2015

Desaparecidos por las FARC



¿Qué hacemos con nuestros loquitos?

Martín Sombra está esperando a la muerte desde que tenía 10 años y se metió de guerrillero. Que no tiene miedo a morir en una prisión. Así se lo dijo al periodista Jefferson Beltrán del programa La Noche de NTN24. Esta muerte colombiana es una vieja loca,  incumplida. ¿A quién se le ocurre dejar esperando durante más de 60 años a un pobre hombre que no tiene familia, que lo único que sabe hacer es torturar y desaparecer gente y que se ha quedado sin trabajo por estar purgando una pena de la que solo le faltan 4 años en la cárcel? Pero así somos los colombianos: injustos, incumplidos, desmemoriados. La muerte olvidó a Martín Sombra y este carcelero de las FARC olvidó qué ocurrió con el Intendente de la policía Luis Hernando Peña Bonilla, secuestrado hace 17 años (1 de noviembre de 1998) junto con 60 policías más en Mitú, capital del departamento de Vaupés. De 21 policías víctimas de esta toma no se ha vuelto a saber nada.
Del Intendente Luis Hernando Peña se conoció la noticia de que estaba loquito; andaba por ahí hablando solo y haciendo disparos de voz contra los matorrales. Un día, Patequeso se lo llevó para el Chute (las letrinas) y en el camino le dijo que ellos tenían la cura para los que se hacían los locos, mientras le apuntaba a la cabeza con una pistola nueve milímetros.
Nadie sabe qué pasó con el Intendente. Martín Sombra sostiene que se lo entregó a dos emisarios del Mono Jojoy. Parece que todos los que tuvieron algún contacto con Luis Hernando Peña están muertos, excepto el Carcelero, pero este ha perdido la memoria o se está haciendo el loquito. ¿Qué les ocurre a los de las FARC cuando se hacen los locos? Los mandamos para Cuba. Enviemos a Martín Sombra para La Habana a ver si se acuerda de los policías desaparecidos que estuvieron en sus gallineros amarrados con cadenas.
En el programa La Noche del viernes 30 de octubre, antevíspera del día de los muertos, Elsa Peña, la hermana del Intendente, le rogó a Timochenko para que le diga la verdad de lo que ocurrió con su hermano y animó a los espíritus: “Que el cuerpo regrese”.
El General retirado, Luis Mendieta, dice que Martín Sombra tiene que saber qué ocurrió con Luis Hernando Peña y también solicita a la cúpula de las FARC para que “den luces de los secuestrados a sus familiares”.
¿A dónde fueron nuestros desaparecidos? ¡Que regresen sus cuerpos con sus luces y tibiezas a ocupar el espacio vacío de nuestros corazones!

César Herrera P.                            
Medellín, nov.1 de 2015